Hoy hemos ido a una de las islas de este laberinto que es lo suficientemente grande como para tener una jungla dentro. Hacemos una hora y media de caminata hasta una aldea en el centro de la isla, viendo todo tipo de insectos en el camino (arañas XXL, etc...). Al llegar a la aldea, el guia nos propuso subir a una alta montaña desde donde hay una vista privilegiada de la bahia y donde los vietnamitas montaron las baterias antiaereas para disparar a los aviones americanos. Inocentes de nosotros le dijimos que si, y tras pasar varios campos de arroz empezo la aventura... una fuertisima pendiente llena de barro resbaladizo y piedras con filos cortantes nos acompañarian todo el camino hasta la cima. Los primeros rios los atravesamos quitandonos la botas, pero cuando nos empezabamos a ver llenos de barro hasta las orejas ya no nos quitamos ni botas ni nada. Tardamos hora y media en subir, y realmente la vista merecio la pena. Lo peor vino al intentar bajar por fuertes pendientes llenas de barro y piedras. Gracias a que nos agarrabamos a arboles y lianas naturales que caen sobre el sendero podiamos mantener el equilibrio. Fue una experiencia alucinante. Al volver a la aldea, una familia nos dio de comer a los 6 integrantes de la expedicion.
Despues de esta agotadora jornada, nos pegamos un bañito en otra isla llamada "monkey island". Nos supo a gloria. Acabamos con las manos llena de cortes, la ropa llena de barro y debido a la humedad tan fuerte, empapados en sudor, asi que la playa nos parecio la mejor del mundo. El nombre de la isla proviene de que los unicos habitantes de ella son monos, nosotros eramos solo visitantes.
Por la noche nos fuimos a conocer el pueblo que hay en la isla. Esa noche no dormiamos en el barco sino en un hotel de este pueblo.
El pueblo era una especia de Torrevieja de los años 40 con puestecillos de souvenirs hechos con conchas, colgantes fluorescentes y demas artilugios que vuelven locos a los orientales. Aqui hay mucho turista japones. Increible la cantidad de peluquerias que hay aqui y de locales de masajes. Hasta los camareros te dan un masaje al pagar la cuenta. Gratis total. Debe ser que asi se entrenan.
Estos tres dias hemos tenido a una guia "estilo vietnam", osea, una chica que aparenta 13 años, que esta todo el dia riendose y que cabria en la funda de un movil. Es casi imposible saber la edad de la gente aqui... lo que de lejos parece un chavalin, resulta que cuando se acerca tiene la edad de Marujita Diaz. Aqui las clinicas de estetica no tienen nada de futuro, esta gente parecen todos una panda de chavalines. Y encima se estan riendo todo el santo dia. Son encantadores.
sábado, agosto 16, 2003
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